A primera hora de la tarde, el plantel de Lama -tal como lo vino haciendo previo a cada presentación de esta ronda definitoria- partió hacia la concentración en las instalaciones que posee en Ciudad Evita el Club Deportivo Italiano.
Distendidos, confiados cada uno en sí mismo y en el grupo, saben que les resta el último esfuerzo, subír el último escalón, para concretar la meta que junto al cuerpo técnico se propusieron al inicio del certámen.
Son muchas cosas las que un jugador piensa en estas instancias decisivas. En su familia, en su futuro, en sus amigos y también en los hinchas. Esos hinchas con los que alguna vez tal vez se fastidiaron mutuamente pero con los que también se alegraron, bailaron y cantaron alambrado de por medio cuando de festejar se trataba.
Y ellos quieren festejar, por sus familias, por su futuro, por sus amigos y también por los hinchas.
Lamadrid y Devoto quieren festejar. No es fácil. Tampoco es imposible. Pero todos sabemos de la capacidad de ellos, de su humildad, de su sacrificio y de la necesidad que todos (ellos y nosotros) tenemos de que el 'Carcelero' vuelva a un sitial que merece.
¡LAMADRID Y DEVOTO ESTAN CON ESTOS MUCHACHOS!
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